Por:Partido Comunista Clandestino de Colombia
En 2010 quedó demostrada la superioridad y la efectividad del Ejército del Pueblo sobre el Ejército de la oligarquía. Así lo demuestran las cifras de ambas fuerzas reportadas oficialmente en sus partes de guerra, en los cuales los militares pro imperialistas tienen muchas razones para mentir. Mientras las FARC reportan que propiciaron 4341 bajas al enemigo en 2272 acciones, la fuerza estatal dice que en más de 15 mil propiciaron al Ejército de Manuel solo 2494 bajas.
En 2010 quedó demostrada la superioridad y la efectividad del Ejército del Pueblo sobre el Ejército de la oligarquía. Así lo demuestran las cifras de ambas fuerzas reportadas oficialmente en sus partes de guerra, en los cuales los militares pro imperialistas tienen muchas razones para mentir. Mientras las FARC reportan que propiciaron 4341 bajas al enemigo en 2272 acciones, la fuerza estatal dice que en más de 15 mil propiciaron al Ejército de Manuel solo 2494 bajas.
El lector y la lectora deben tener en cuenta en esta comparación las inmensas diferencias en capacidades militares, número de unidades entre ambas fuerzas, de logística y presupuestos. En primer lugar, el discurso oficial dice que las FARC están derrotadas y que sólo cuentan con unos pocos miles de guerrilleros y guerrilleras, en desbandada además. Las Fuerzas Militares y de Policía en cambio, suman 426014 hombres y mujeres y solo el Ejército tiene 218745 entre oficiales y soldados.
En segundo lugar, buena parte de las bajas a la insurgencia bolivariana son propiciadas por aeronaves de la recién creada División del Ejército y de la Fuerza Aérea de Colombia y de los Estados Unidos. Según datos oficiales, en el año 2002 las FFMM contaban en total con 428 aeronaves y hoy tienen 525 unidades entre helicópteros y aviones. Se adquirieron 97 nuevas aeronaves y se modernizaron 24 aviones K-FIR. En abril de 2009 Santos sostuvo que el número de helicópteros se incrementó a 50 Black-Hawk. Las FARC reportaron 75 Helicópteros averiados y uno destruido, sumados a las 21 avionetas y aviones averiados.
La industria militar de Colombia está produciendo bombas hasta de 500 libras y, como si fuera poco, con los aviones de USA lanzan misiles con una capacidad bestial de destrucción; tanta, que después deben remover toneladas de tierra para encontrar los guerrilleros masacrados con esa desproporción en el uso de la fuerza. INDUMIL reporta que produce más de 60 millones de cartuchos 5.56. Esto lo hacen mientras se quejan de las minas, las pipetas y otra serie de armamento popular.
En tercer lugar, en el presupuesto 2010 se asignaron más de 10 mil millones de dólares para el sector defensa. Sin embargo, también hay que tener en cuenta que en esta guerra el régimen de terror se gasta mucho más dinero del que aparece en el presupuesto público de éste sector. Es decir, allí no se incluye el presupuesto de otras dependencias del mismo Estado que también tienen tareas en la confrontación contra el Pueblo como Familias en Acción con los programas de reinserción, redes de informantes y otras cuentas paralelas del DAS por ejemplo.
No se cuentan los recursos de la Cancillería de Guerra; ni los narco dólares financiando el paramilitarismo; ni la plata de ganaderos, multinacionales y otros empresarios para la contra revolución; tampoco se contabilizan los recursos de los medios de comunicación difundiendo propaganda de Estado; y mucho menos se incluyen los más de 500 millones de dólares que públicamente se anunciaron para el Plan Colombia el año pasado y que ya superaron los 10 mil millones desde que se emprendió.
En cuarto lugar, es importante considerar que de los resultados publicados por los santanderistas no se han descontado los denominados “falsos positivos” ni otras prácticas degeneradas de las fuerzas gubernamentales para inflar las cifras. A esto se suma la manipulación mediática, la corrupción, el afán por mostrar logros y el engaño a sus enemigos y a la sociedad entera: factores estos comunes en un régimen podrido como el colombiano y presentes para valorar la información que produce un Ejército totalmente degradado.
En ese sentido, es creciente el número de denuncias, no tanto de codenas, a miembros de esta fuerza debido a los asesinatos a niños y niñas, violaciones a mujeres, masacres en comunidades, incluso por violaciones carnales entre los soldados. Dicho sea de paso, las FFMM son la institución más demandada en Colombia y concentran cerca del 70% de los pagos por pleitos jurídicos casados por estos vejámenes. Esto sin mencionar el estado de desmoralización de la tropa alentada solo por el salario que convoca miles de jóvenes que no tienen ninguna otra oportunidad de empleo.
A propósito de esto, y para terminar, en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo, la MORAL REVOLUCIONARIA está en un punto bien alto. Esto, más la experiencia de cuatro décadas que le permitieron vencer el Plan Colombia y el Plan Patriota en particular, explican los resultados que hoy tienen contagiada de esperanza las demás luchas del Pueblo en toda la Patria Grande. La consigna entonces de ¡Venceremos!, está cada vez más cerca de hacerse realidad. Y con esta victoria se podrá concretar también la frase del himno fariano según la cual ¡Socialista el futuro será!
En segundo lugar, buena parte de las bajas a la insurgencia bolivariana son propiciadas por aeronaves de la recién creada División del Ejército y de la Fuerza Aérea de Colombia y de los Estados Unidos. Según datos oficiales, en el año 2002 las FFMM contaban en total con 428 aeronaves y hoy tienen 525 unidades entre helicópteros y aviones. Se adquirieron 97 nuevas aeronaves y se modernizaron 24 aviones K-FIR. En abril de 2009 Santos sostuvo que el número de helicópteros se incrementó a 50 Black-Hawk. Las FARC reportaron 75 Helicópteros averiados y uno destruido, sumados a las 21 avionetas y aviones averiados.
La industria militar de Colombia está produciendo bombas hasta de 500 libras y, como si fuera poco, con los aviones de USA lanzan misiles con una capacidad bestial de destrucción; tanta, que después deben remover toneladas de tierra para encontrar los guerrilleros masacrados con esa desproporción en el uso de la fuerza. INDUMIL reporta que produce más de 60 millones de cartuchos 5.56. Esto lo hacen mientras se quejan de las minas, las pipetas y otra serie de armamento popular.
En tercer lugar, en el presupuesto 2010 se asignaron más de 10 mil millones de dólares para el sector defensa. Sin embargo, también hay que tener en cuenta que en esta guerra el régimen de terror se gasta mucho más dinero del que aparece en el presupuesto público de éste sector. Es decir, allí no se incluye el presupuesto de otras dependencias del mismo Estado que también tienen tareas en la confrontación contra el Pueblo como Familias en Acción con los programas de reinserción, redes de informantes y otras cuentas paralelas del DAS por ejemplo.
No se cuentan los recursos de la Cancillería de Guerra; ni los narco dólares financiando el paramilitarismo; ni la plata de ganaderos, multinacionales y otros empresarios para la contra revolución; tampoco se contabilizan los recursos de los medios de comunicación difundiendo propaganda de Estado; y mucho menos se incluyen los más de 500 millones de dólares que públicamente se anunciaron para el Plan Colombia el año pasado y que ya superaron los 10 mil millones desde que se emprendió.
En cuarto lugar, es importante considerar que de los resultados publicados por los santanderistas no se han descontado los denominados “falsos positivos” ni otras prácticas degeneradas de las fuerzas gubernamentales para inflar las cifras. A esto se suma la manipulación mediática, la corrupción, el afán por mostrar logros y el engaño a sus enemigos y a la sociedad entera: factores estos comunes en un régimen podrido como el colombiano y presentes para valorar la información que produce un Ejército totalmente degradado.
En ese sentido, es creciente el número de denuncias, no tanto de codenas, a miembros de esta fuerza debido a los asesinatos a niños y niñas, violaciones a mujeres, masacres en comunidades, incluso por violaciones carnales entre los soldados. Dicho sea de paso, las FFMM son la institución más demandada en Colombia y concentran cerca del 70% de los pagos por pleitos jurídicos casados por estos vejámenes. Esto sin mencionar el estado de desmoralización de la tropa alentada solo por el salario que convoca miles de jóvenes que no tienen ninguna otra oportunidad de empleo.
A propósito de esto, y para terminar, en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo, la MORAL REVOLUCIONARIA está en un punto bien alto. Esto, más la experiencia de cuatro décadas que le permitieron vencer el Plan Colombia y el Plan Patriota en particular, explican los resultados que hoy tienen contagiada de esperanza las demás luchas del Pueblo en toda la Patria Grande. La consigna entonces de ¡Venceremos!, está cada vez más cerca de hacerse realidad. Y con esta victoria se podrá concretar también la frase del himno fariano según la cual ¡Socialista el futuro será!
Hasta la victoria siempre! Venceremos!!!
ResponderEliminarUm abrazo, camarada revolucionário.