LUCHANDO CONTRA EL FASCISMO DESDE TODAS LAS TRINCHERAS

LUCHANDO CONTRA EL FASCISMO DESDE TODAS LAS TRINCHERAS

Canciones de Combate

martes, 31 de mayo de 2011

De la ética de Gloria a la cuenca de la estolidez

Por: Irán Aguilera Abad

La profesora de Ética de la Comunicación de la Universidad Central de Venezuela, Gloria Cuenca, mostró una vez más ante sus lectores, como lo hace religiosamente en su columna dominguera, un estado crónico de disociación psicótica. Es que no puede ser otra la causa de su rara conducta que ya nos mueve a la conmiseración. Es muy evidente que tiene sembrada en su subconsciente una realidad ficticia en la que todos los males, todo lo que considera negativo o lo que le sucede en sus cuitas proviene de una sola causa: Chávez.

Pareciera no tener seriedad rebatir lo que dice una persona disociada, pero lo que nos mueve a escribir estas líneas es la especie propalada por la columnista el pasado domingo, la cual no tendría mucho impacto sino la siguieran repitiendo de manera irresponsable otros opinadores del oficio opositor. Esta profesora de ética, sin prueba alguna, sólo aferrada a la creencia en un mundo ficticio que le han inoculado en su cerebro, acusa a los que están del lado de la revolución de profanar la imagen de la Divina Pastora. Nos señala de violentos, de portadores del odio y de intolerantes. Que sólo nos motiva el deseo de hacerle daño al manso corderito del gobernador del Estado Lara; que estamos acicateados por ignorar lo de la trascendencia de la Virgen María en sus diferentes advocaciones. Nada menos. Todo eso, según la profesora de ética, nos hace cometer locuras al sabernos en minoría. Lean esta perla (JVR dixit) sacada de la cuenca de la estolidez:

“La agresión perpetrada en Barquisimeto contra la Virgen es una evidencia de lo que piensa ese grupo de personas que se ubican del lado de la revolución. No tienen ni sienten temor de Dios, puesto que no creen en su existencia.”

Para sustentar esa afirmación la profesora de periodismo sacó de su chistera, cual la maga Gloria, la muy manoseada y poco comprendida (por ellos) cita de Marx: “la religión es el opio de los pueblos”. ¡Eureka! ¡He allí la explicación de la maldad de los chavistas! sí, la de esos mismísimos que pregonan la teoría marxista, la revolución socialista en pleno siglo XXI, los ateos. De verdad, lo vuelvo a repetir, si no fuese porque esto que nos provoca risas es coreado por los medios de la derecha con uno u otro matiz, diría con el recordado Mario Moreno “yo ni siquiera te ignoro”.

Por eso, ahora, voy a sacar provecho de la oportunidad que nos brinda toda esa cuenca de la estupidez ilustrada de la oposición venezolana. Intentaré desmontar el mito creado por esos sesudos en torno a la mentada cita del querido Moro: “la religión es el opio de los pueblos”:

No hay acuerdo entre los traductores, algunos también dicen “la religión es el opio del pueblo”; en el original en alemán: “Die Religion … Sie ist das Opium des Volkes”, así lo escribió Marx en un trabajo titulado Contribución a la Crítica de la Filosofía del Derecho de Hegel que []publicó en 1844, en el periódico los Anales Franco-Alemanes dirigido por él. Antes que Marx pensadores como Kan, Herder, Feuerbach y otros, compararon a la religión con el opio. Para tener una interpretación lo más próxima posible de lo que quiso decir el padre del socialismo científico, debemos ubicarnos en el contexto histórico de mediados del siglo XIX, y eso es lo que ignoran o tratan de ignorar los ideólogos de la derecha al sacar con pinzas, en abstracto, la cita. Hay que tomar en consideración que el opio en esa época no se veía como la droga que se ve hoy en día. Estaba legalizado. Era considerada una medicina muy importante, aunque su uso comenzaba a salirse del control y, en consecuencia, tendía a ser un problema de salud pública, e igualmente fue la causa para justificar algunas guerras coloniales como lo fueron las guerras del opio. Si el opio era una medicina de mucho uso para terribles dolencias pudiéramos interpretar la cita con una de un contemporáneo de Marx, Moses Hess, “La religión puede hacer soportable … la infeliz conciencia de servidumbre… de igual forma el opio es de buena ayuda en angustiosas dolencias”

Si buscamos por toda la obra de Marx no encontraremos por ninguna parte que la religión es el enemigo a vencer, al contrario, podemos ver muchas críticas a quienes limitaban su pensamiento a la crítica de las ideas religiosas, como lo hacían algunos desde la filosofía alemana. Los ideólogos de la derecha contemporánea (entre ellos los criollos) por ignorancia o por deshonestidad intelectual, no dicen que en el mismo trabajo Marx señala:

“la crítica del cielo se transforma así en crítica de la tierra; la crítica de la religión en crítica del Derecho, la crítica de la teología en crítica de la política”

Ni Marx ni Engels cambiaron jamás el objetivo de su obra: transformar las condiciones sociales reales de vida. No se diluyeron en una lucha unilateral contra la religión. Explicaron de manera genial las formas históricas y sociales concretas de religión. Nos legaron una visión dialéctica de los fenómenos religiosos; criticaban el papel ideológico en favor del orden, del sistema económico y político burgués, que cumplen y han cumplido las grandes religiones como instituciones y de manera particular las jerarquías religiosas (si hay cierto parecido con el papel CEV es pura casualidad), pero igualmente, y de ello hay abundante bibliografía, apreciaron el potencial explosivo de algunas aspiraciones religiosas y la forma como una y otra vez se convirtieron en factores de resistencia y lucha de los oprimidos por la liberación.

Creo que aclaré bastante esto. Pero donde si no hay duda es en que los intelectuales opositores, hijos de la IV república, tienen en sus tuétanos el pecado original que les enrostró Manuel Vicente Romerogarcía en el Cojo Ilustrado (enero de 1896) “”…Venezuela es el país de las nulidades engreídas y las reputaciones consagradas…”

Cuando Mueren los Imperios


Por Mumía Abú-Jamal

La Revista, Foreign Affairs publicó recientemente un extraordinario artículo por el conservador historiador británico, Niall Ferguson, de las Universidades de Harvard y Oxford, en el que estudia las razones que causaron la caída de diez grandes Imperios.

Su tesis básica es que grandes y poderosos imperios pueden caer con una rapidez sorprendente, generalmente en el espacio de un ciclo de vida –y a veces en menos tiempo.

Citando obras de historiadores e intelectuales, Ferguson escribe sobre los Imperios Romano, Británico, Francés, Otomano, Ming, Qing, y sobre el Imperio Ruso, entre otros.

Muchos Imperios duraron varios siglos y tuvieron un poder casi global.

¿Cómo cayeron? Algunos debido a crisis económica, generalmente causada por aventuras militares, como es el caso francés. Los franceses dieron tropas y dinero a los revolucionarios Norteamericanos que buscaban terminar con la ocupación de Gran Bretaña, enemiga histórica de Francia.

En 2 décadas, los franceses estuvieron virtualmente en quiebra y el pueblo salió a las calles en rebelión contra la nobleza. En pocos años, una revolución envolvió toda Francia y un rey, Louis XVI, perdió su noble cabeza.

Roma, la gloria de Europa, cayó víctima de fuerzas internas y externas.

En 50 años, la población romana cayó un 75%. Vándalos destruyeron sus fronteras, y al mismo tiempo sus antiguos soldados de volvieron bandoleros. La división Este-Oeste, Roma y Constantinopla, debilitó la unidad imperial. Según Ferguson, la gran caída de Roma duró menos de una década.

Ferguson no solo estaba dando una lección de historia. Su artículo era para el Imperio de los Estados Unidos — uno de los Imperios más poderosos y ricos de la historia.

¿Cuál era su propósito?

Que sepamos que los Imperios - aún los que parecen más indestructibles - pueden sufrir por la convergencia de problemas financieros, militares, del medio ambiente y de tantos otros; y quebrarse como se quiebra un huevo.

Esta es la lección de la historia - ningún Imperio dura para siempre

lunes, 30 de mayo de 2011

Desde Libia



Escrito por: Leonor Massanet

Incongruencias de Aljazeera

El canal de desinformación de TV ALJAZEERA ha dicho que parte de las tropas del ejercito del gobierno libio legítimo han desertado para acercarse a los rebeldes...pero oh! casualidad en lugar de quedar luchando contra su gobierno dice el canal de TV que se han ido a Italia.
A pesar de que no se puede confirmar esta historia seguro que saldrá en muchos medios. Ahora los rebeldes armados junto con la OTAN y Alkaeda han recrudecido sus asesinatos y destrucción a los Libios y libia y constantemente usan propaganda para atemorizar a la población.
Es un escandalo y una auténtica perversión.
Lo que comentais de estas personas que están preparando una demanda contra el presidente frances por lo que está haciendo, luego dieron una rueda de prensa en Tripoli y fue deprimente una vez más ver como la mayoría de los reporteros intentaban preguntar agresivamente y cambiando el sentido de las cosas.
La mayoría de la madia desinforma y no sabemos hasta que límite. Ya veo que si ha salido en algunos medios es porque si que hay gente buena entre los periodistas...pero pocos

Las armas

Altec, hay incluso fotografías de las armas que Katar ha llevado a Benghazi, son armas muy y soficticadas y les han llevado incluso gente para adiestrarles en las armas y en estrategia de guerra.

Estas armas tan sofisticadas no son Libias porque Libia no tiene armas nuevas.

Respecto a que hacen las tribus solo hablando, es algo que es muy consecuente con la situación que no os podeis imaginar después de la desinformación que nos llega. La mayoría de las personas libias y por tanto las tribus libias no han provocado ni buscado nada que tenga que ver con una guerra y lo que es más grave es que la ONU con la resolución prohibe a Libia usar los aviones que además se los han bombardeado y le han bombardeado los aeropuertos, es decir les han quitado toda opción de defenderse.

Si te cortan los brazos y te apalean, solo te queda buscar salidas negociadas y además ellos tienen la esperanza de que esto terminba de la misma manera absurda que ha empezado.

Ha sido totalmente orquestado desde fuera, parece que Francia es la primera protagonista, que hay muchos franceses en Benghazi y que los rebeldes armados tratan con la OTAN a través de Francia.

Altec las armas llegan en tal cantidad a Benghazi que el área se ha convertido en el primer mercado de armas del norte de Africa. Egipto ha protestado por la gran cantidad de armas que están llegando de Libia. Alkaeda que trabaja matando junto con los rebeldes armados también se ha armado hasta los dientes y han transportado armas a Argelia y malí para proximos movimientos.

Lo que está ocurriendo en Benghazi es muy muy grave. Sin embargo los medios proyectan todo sobre el gobierno legítimo y esto es lo que todo el mundo se entera.

Las tribus es el pueblo mismo, pero son las personas representativas de las familias extensas y su poder en el país es mucho mayor que el gobierno. Es más si ocurre algo en libia normalmente es resuelto por las tribus y si no lo consiguen resolver entonces entra la ley.

Es dificil comprender este sistema de gobierno desde aquí, pero os aseguro que al final es más democrático que el nuestro aunque se que a la mayoría le costará creerlo. Ayer me decía un libio que "nosotros no le pedimos a Francia que gobierne su pais por un sistema de tribus, pues francia tampoco nos puede decir que gobernemos el país a su estilo. Me pareció algo muy obvio.

Es necesario comprender con mucho detalle Libia y los libios para darse cuenta de la agresión a que están siendo sometidos y que no tienen alternativa para defenderse. Cuando el gobierno libio hundió un barco que pretendía atracar en Misratah, al día siguiente los aviones de la OTAN bombardearon el puerto de pescadores de Tripoli y destruyeron un montón de barcos. La gran diferencia es que el barco de katar se acercaba a unas costas que no son suyas, cargados de armas para matar y el ejercito libio solo se defendió, mientras que la OTAN hace incursiones sin encontrar ningún obstaculo y suelta bombas asesinando y destruyendo gratuitamente.

Es una masacre, es un destrozo. Es imprescindible que grupos imparciales si es que hay alguno en el mundo venga


domingo, 29 de mayo de 2011

El regreso de Zelaya y el futuro de la Resistencia hondureña


ESCRITO POR CARLOS AZNÁREZ

Volvió Mel Zelaya y el pueblo hondureño explotó de alegría y entusiasmo. Esa misma gente que durante dos años ha generado la mayor Resistencia centroamericana que se recuerde. Miles y miles de hombres, mujeres y niños en la calle, enfrentando a los militares y policías, poniendo el cuerpo a las balas y también dejando en esa dura batalla decenas de muertos. Esta vez, llegaron a Tegucigalpa desde todos los puntos del país a reencontrarse con su líder.

Volvió Mel Zelaya, y Honduras se tiñó del rojo de la bandera del Frente Nacional de Resistencia Popular, y del azul de la enseña patria, mientras las consignas de "Sí, se pudo" y "Fuera el imperialismo" se mezclaban con los pitidos al gobierno de Porfirio Lobo, mientras cantaban también ese himno universal de los que luchan en cualquier rincón del mundo: "El pueblo unido jamás será vencido".

Volvió Mel Zelaya y ratificó públicamente el "Acuerdo de Reconciliación" firmado en Cartagena de Indias (Colombia), que incluye entre sus puntos la investigación de las violaciones de derechos humanos (derechos que siguen siendo pisoteados a diario por el gobierno de Lobo), y la posibilidad de realizar un plebiscito en aras de lograr la tan ansiada Asamblea Constituyente, por la que tantas veces el pueblo salió a la calle en estos dos años.

Sin embargo, en este Acuerdo hay algo no cierra, que genera lógicas desconfianzas, que hace que miles de militantes de la Resistencia deban estar alerta de aquí en más, y tiene que ver con que los que realizaron un golpe de Estado pro-yanqui como el de Honduras, siguen en el gobierno, y más allá de permitir el regreso de Zelaya no será fácil que cedan lo que vienen usurpando desde tiempo atrás. Además, uno de los mediadores para que este Acuerdo se realizara es nada menos que un genocida del pueblo colombiano, el presidente Santos, el mismo que posibilita que los yanquis hayan instalado nueve bases militares en el país, para amenazar a los países del continente que no se alinean con EEUU:

Otro punto de discordia es la casi segura entrada de Honduras a la OEA, lo que se concretaría en esta próxima semana. No hay ninguna razón que convenza a los que han luchado todo este tiempo, sobre semejante despropósito. Nadie ignora, por más discurso políticamente correcto se quiera escribir, que Porfirio Lobo es el continuismo de la dictadura impuesta en 2009. De lo contrario, que se lo pregunten a los maestros golpeados, torturados y asesinados, o a los periodistas que en un lento cuentagotas son baleados por el paramilitarismo. Peor aún, que opinen los campesinos del Aguán que han sufrido hasta ayer nomás la muerte de decenas de sus militantes. Contra ellos se han lanzado, mes a mes, las guardias armadas del empresario Miguel Facussé (sostén financiero de los golpistas) generando verdaderas masacres, que por supuesto siguen impunes.

No, Honduras de Lobo no debería volver a la OEA, y en ese sentido son muy claros los dirigentes de la Resistencia Berta Cáceres, Carlos Reyes o Juan Barahona, apuntando que sería un "error injustificable", mientras no se cumplan las exigencias populares que no terminan de ninguna manera con el retorno de Zelaya.

Volvió Manuel Zelaya y se abrazó con su pueblo, que le demostró el cariño que le profesa por haber sido el primer Presidente que pensó en los más humildes, a pesar de provenir de un pasado político centro-derechista, pero que en el marco del gobierno al que llegó por el voto popular, fue virando correctamente hacia la izquierda y generó propuestas sumamente progresistas en un país que décadas atrás funcionara como un enclave estratégico de Washington.

Volvió Manuel Zelaya y prometió profundizar el avance de la Resistencia que él mismo coordina. En el acto multitudinario fue presentando uno a uno a la delegación internacional que lo acompaño desde Nicaragua, reivindicando la solidaridad latinoamericana que siempre lo acompañó durante su exilio. Valoró hondamente el papel de Brasil, de Ecuador, de Argentina y por supuesto de la Venezuela de Hugo Chávez.

Párrafo aparte merecen las palabras de otra de las acompañantes de Zelaya,

la combativa senadora Piedad Córdoba. Cuando Mel le cedió el micrófono, elogió a Honduras y a la Resistencia, y en un gesto incomprensible, vivó al genocida colombiano Juan Manuel Santos, invitando a los allí reunidos a agradecerle su mediación. No tuvo éxito: ese mismo pueblo sabio, que cuando minutos antes, Zelaya mencionara al mismo personaje, mantuvo un obligado silencio de aplausos y lanzó varios gritos de abucheo, volvió a repetir el gesto digno. Un momento después, sin dudarlo, ovacionaba a Hugo Chávez. Algunos dirigentes políticos progresistas deberían tener en cuenta que la conciencia de los de abajo no se construye con tan bruscos viraje de timón, que sólo sirven para sembrar el desconcierto.

Volvió Manuel Zelaya. Si, y todos los luchadores del Tercer Mundo habrán de festejarlo ya que, por encima de los Acuerdos diplomáticos, esta lucha se ganó en la calle. Si la Resistencia no hubiera mantenido la pulseada en todos estos meses, y la solidaridad popular internacionalista, no la hubiera acompañado, este retorno sería difícil de imaginar.

Ahora, otra vez y como siempre, pero con Zelaya en el territorio, la batalla contra los que lo echaron hace dos años habrá de agudizarse. Imaginar un escenario diferente es no conocer los puntos que calza el enemigo que se enfrenta. En el tiempo que viene, la movilización será la mejor autodefensa popular. En ese sentido lo tiene claro los integrantes del COPINH (Consejo de Organizaciones Populares e indígenas de Honduras), una de las organizaciones que está en la pelea desde hace décadas: No descansaremos hasta desmontar las estructuras golpistas que hoy están en el poder gozando de la impunidad nacional e internacional, contra lo que continuaremos alzando nuestra lucha porque somos un pueblo digno que no está dispuesto retroceder. No olvidamos, no perdonamos, no nos reconciliamos”.


viernes, 27 de mayo de 2011

Los planes sionistas para el pueblo palestino

Escrito por RALPH SCHOENMAN

LOS OBJETIVOS SIONISTAS

El objetivo del sionismo nunca fue meramente colonizar Palestina, al modo que se han planteado objetivos semejantes los movimientos coloniales e imperiales clásicos en los siglos XIX y XX. El colonialismo europeo en África y Asia buscaba, esencialmente, explotar a los pueblos indígenas como mano de obra barata y extraer los recursos naturales para conseguir beneficios exorbitantes.

Lo que distingue al sionismo del resto de movimientos coloniales es la relación entre los colonos y el pueblo a conquistar. El movimiento sionista tiene el objetivo declarado no sólo de explotar al pueblo palestino sino de dispersarlo y desposeerlo. El intento era sustituir a la población indígena por una nueva comunidad de colonos, erradicar a los campesinos, artesanos y población urbana de Palestina y sustituirlos por una fuerza de trabajo completamente nueva compuesta por los colonizadores.

Al negar la existencia del pueblo palestino, el sionismo pretendía crear el clima político para erradicarlo no sólo de su tierra sino también de la historia. Cuando reconocían de algún modo la existencia de los palestinos, les presentaban como un residuo semisalvaje, nómada. Falsificaban los hechos históricos, procedimiento que empezó en el último cuarto del siglo XIX pero se prolonga hoy con escritos pseudohistóricos del estilo de “Desde Tiempo Inmemorial”, de Joan Peter.

El movimiento sionista buscó diversos padrinos imperiales para su sangrienta empresa. Entre ellos el imperio otomano, el germánico, el Raj británico, el colonialismo francés y la Rusia zarista. Los planes sionistas para el pueblo palestino anticipaban la solución otomana para los armenios, que fueron exterminados en el primer genocidio continuado del siglo XX.


Los planes sionistas para el pueblo palestino


Desde el principio, el movimiento sionista buscó la “armenización” del pueblo palestino. Como los nativos americanos, los palestinos eran considerados como “un pueblo que sobra”. La lógica era eliminarlo. Tenía que dar lugar a un genocidio.

Esto vale también para el movimiento obrero sionista, que trató de dar una “pátina” socialista a la empresa colonial. Aaron David Gordon fue uno de los principales teóricos del sionismo laborista, fundador del partido sionista Ha'Poel Ha Tzair (El joven Obrero) y partidario de Poale Zion (Trabajadores de Sion).


Walter Laqueur reconoce en su “Historia del Sionismo” que “A D. Gordon y sus compañeros querían que cada árbol y cada matorral fuese plantado por expedicionarios judíos”.

Gordon acuñó la consigna “conquista del trabajo” (“Kibbush avodah”). Llamó a los capitalistas judíos, y a los directivos de la plantación de Rotschild, que habían conseguido tierra de los terratenientes turcos absentistas pasando por encima del pueblo palestino, a “contratar a judíos y sólo a judíos”. Organizó boicots a las empresas sionistas que no contrataban exclusivamente a judíos y organizó huelgas contra los colonos de Rotschild que permitían que campesinos árabes fuesen aparceros o trabajasen, incluso como mano de obra barata.

De este modo, los “sionistas obreros” utilizaron los métodos del movimiento obrero para impedir la contratación de árabes; su objetivo no era explotar, sino usurpar.


La sociedad palestina


Al final del siglo XIX había en Palestina mil pueblos o aldeas. Jerusalén, Haifa, Gaza, Yaffa, Nablús, Acre, Jericó, Ramle, Hebrón y Nazaret eran ciudades florecientes. Las colinas estaban laboriosamente abancaladas. Canales de riego surcaban todo el territorio.

Los jardines de limoneros, los olivares y los cereales de Palestina eran conocidos en todo el mundo. El comercio, el artesanado, la industria textil, la construcción y la producción agrícola eran prósperas. www.marxismo.org

Los relatos de los viajeros de los siglos XVIII y XIX están llenos de datos, al igual que los informes académicos publicados quincenalmente en el siglo XIX por el Fondo Británico para la Exploración de Palestina. www.marxismo.org

En realidad, fue precisamente la cohesión social y la estabilidad de la sociedad palestina lo que llevó a Lord Palmerston a proponer premonitoriamente en 1840, cuando Gran Bretaña estableció consulado en Jerusalén, la fundación de una colonia judía europea para “preservar los intereses más generales del Imperio Británico”

La sociedad palestina, aun padeciendo la colaboración de los terratenientes feudales (effendi) con el imperio otomano, era productiva y culturalmente diversa, con uncampesinado muy consciente de su papel social.


Los campesinos y la población urbana palestina habían establecido una distinción clara y muy asimilada entre los judíos que vivían entre ellos y los colonizadores que sobrevendrían, ya que en 1820 los 20.000 judíos de Jerusalén se integraron totalmente en la sociedad palestina y fueron aceptados.

Cuando en 1886 los colonialistas de Petah Tikvah trataron de expulsar a los campesinos de su tierra chocaron con una resistencia organizada, pero los trabajadores judíos de los pueblos y comunidades vecinos no sufrieron ninguna consecuencia. Cuando los armenios que huían del genocidio turco se establecieron en Palestina fueron bien recibidos. Ese genocidio fue ominosamente defendido por Vladimir Jabotinsky y otros sionistas en su afán por lograr el apoyo turco.

En realidad, hasta la Declaración Balfour (1917), la respuesta palestina a las colonizaciones sionistas fue imprudentemente tolerante. En Palestina no había ningún odio organizado contra los judíos, nadie organizaba masacres como las del zar o los antisemitas polacos, no surgió ninguna reacción simétrica por el lado palestino contra los colonos armados que utilizaban la fuerza siempre que podían para expulsar a los palestinos de su tierra. Ni siquiera las algaradas espontáneas que expresaban la rabia de los palestinos contra los constantes robos de su tierra iban dirigidos contra los judíos como tales.


Cortejando el favor del Imperio


En 1896 Theodor Herzl estableció su plan para inducir al imperio otomano a entregar Palestina al movimiento sionista: “Suponiendo que Su Majestad el Sultán nos entregase Palestina, podríamos a cambio ocuparnos de regularizar las finanzas de Turquía. Formaríamos allí una avanzada de la civilización frente a la barbarie.”

En 1905, el VII Congreso Sionista Mundial tuvo que reconocer que el pueblo palestino estaba organizando un movimiento político para independizarse nacionalmente del imperio otomano, lo que no sólo amenazaba la dominación turca sino también los

planes sionistas.

En ese congreso, Max Nordau, destacado líder sionista, resumió las preocupaciones sionistas: “El movimiento que se ha apoderado de gran parte del pueblo árabe puede con facilidad tomar en Palestina una dirección que resulte nociva... El gobierno turco puede verse obligado a defender su dominio en Palestina y Siria mediante la fuerza armada... en tales circunstancias cabe convencer a Turquía de que será importante para ella contar en Palestina y Siria con un grupo fuerte y bien organizado que... se oponga a cualquier ataque a la autoridad del Sultán y defienda su autoridad con todas sus fuerzas».

Cuando el Kaiser se dispuso a forjar una alianza con Turquía como parte de su enfrentamiento con Gran Bretaña y Francia por el control del Oriente Medio, el movimiento sionista hizo ofrecimientos similares a la Alemania imperial. El Kaiser mantuvo casi diez años un tira y afloja negociador con la dirección sionista para formular un plan de estado judío bajo auspicios otomanos que tuviese como tarea principal la erradicación de la resistencia palestina anticolonial y la garantía de los intereses de la

Alemania imperial en la región.

Sin embargo, en 1914, la Organización Sionista Mundial tenía muy avanzadas sus gestiones paralelas para embarcar al imperio británico en la voladura del imperio otomano con ayuda sionista. Haim Weizmann, que llegaría a ser presidente de la Organización Sionista Mundial, hizo una importante declaración pública: «Podernos decir razonablemente que si Palestina cae en la esfera de influencia británica y la Gran Bretaña alienta el establecimiento de los judíos allí, como dependencia británica, en veinte o treinta años podríamos tener allí a un millón de judíos, o quizá más; desarrollarían el país, le restituirían la civilización y formarían una guardia muy efectiva del Canal de Suez.»


La declaración Balfour


Weizmann consiguió arrancar a los británicos lo que los dirigentes sionistas habían pedido simultáneamente a los gobiernos imperiales otomano y alemán. El 2 de noviembre de 1917 se publicaba la Declaración Balfour. Entre otras cosas, decía: «El Gobierno de Su Majestad ve favorablemente el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío, y hará cuanto esté en su mano para facilitar la realización de ese objetivo...»

Los sionistas definían su reivindicación de Palestina con todo cinismo. Tan pronto afirmaban que Palestina era una tierra desierta visitada ocasionalmente por nómadas como proponían someter a la población palestina a la que poco antes habían tratado de hacer invisible. El propio A.D. Gordon insistió machaconamente en la necesidad de impedir que los palestinos, cuya no existencia repetía, cultivasen la tierra. Digitalizado por CelulaII


Esto se traducía en la completa expulsión de los no judíos de la “patria judía”. Una similar descripción informaba los pronunciamientos de los dirigentes británicos y sionistas en sus planes para la población palestina. En la época de la Declaración Balfour, los ejércitos imperiales británicos habían ocupado la mayor parte del imperio otomano en Oriente Medio, enrolando a líderes árabes para combatir a los turcos bajo dirección británica a cambio de garantías británicas de “autodeterminación”.

Mientras los sionistas insistían en su propaganda en que Palestina estaba despoblada, en sus tratos con los padrinos imperiales dejaban claro que había que someterla y se ofrecían como locus operandus.

Los británicos respondían de igual modo. La Declaración Balfour también contenía un pasaje destinado a engañar a los líderes feudales árabes impresionados por la traición del imperio británico al entregar a los sionistas la misma tierra a la que se había prometido la autodeterminación árabe: «debiéndose entender claramente que nada se hará que pueda perjudicar los derechos civiles y religiosos de las comunidades no judías existentes en Palestina...».

Los británicos habían utilizado durante años a la dirección sionista para conseguir apoyo de los bancos y grandes capitalistas judíos de los Estados Unidos y la Gran Bretaña a su guerra contra el imperio alemán. Con Weizmann se preparaban para utilizar la colonización sionista de Palestina como instrumento para controlar políticamente a la población palestina.

La tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra era en realidad un país en ebullición contra el yugo colonial. El propio ex-premier Balfour fue brutalmente explícito en memorandums dirigidos a los funcionarios, a pesar de sus declaraciones cara a la galería sobre los “derechos civiles y religiosos de las comunidades no-judías (sic) de Palestina”:

«Con razón o sin ella, bueno o malo, el sionismo está arraigado en necesidades presentes y esperanzas

futuras de importancia mucho más profunda que los deseos de los más de 700.000 árabes que actualmente ocupan el antiguo país».

La conexión sudafricana

Ese conchabamiento secreto entre Balfour y la dirección sionista para traicionar las aspiraciones del pueblo palestino presenta una dimensión de interés particular. El general Jan Smuts, gran amigo de Weizmann y futuro primer ministro de Sudáfrica, como delegado de ese país en el gabinete de guerra británico durante la I Guerra Mundial contribuyó a empujar al gobierno británico a adoptar la Declaración Balfour y comprometerse a construir una colonia sionista bajo dirección británica.

La relación entre el movimiento sionista y los colonos sudafricanos se había desarrollado anteriormente a través de la amistad entre el general Smuts y Haim Weizmann. Al filo del siglo había ya en Sudáfrica una considerable colonia judía, sobre todo procedente de Lituania. El movimiento sionista consideraba a esos judíos particularmente receptivos a las ideas sionistas porque en Sudáfrica tenían ya un status de

colonos. Los dirigentes sionistas viajaban constantemente a Sudáfrica en busca de apoyo político y financiero.

N. Kirschner, ex-presidente de la Federación Sionista Sudafricana evoca con gran viveza la interacción íntima entre los dirigentes sionistas y sudafricanos, la identificación de sionistas como Weizmanny Herzl con la concepción sudafricana de una colonización basada en la discriminación racial y la importancia del pacto virtual entre ambos movimientos.

Al identificar al sionismo con la ideología de los colonos sudafricanos, Haim Weizmann no hacía sino seguir la admiración expresada anteriormente por Teheodor Herzl, el fundador del sionismo político, hacia el ideólogo de la quintaesencia colonial, SirCecil Rhodes. Herzl pretendió inspirar su propio futuro político en las conquistas de Rhodes: «Naturalmente, hay grandes diferencias entre Cecil Rhodes y mi humilde persona, con gran desventaja personal de mi parte; pero hay una gran ventaja objetiva por parte del movimiento sionista».

Herzl era partidario de que los sionistas dispersasen a los palestinos utilizando los métodos empleados por Rhodes, y urgía la formación de un equivalente judío de las sociedades comanditarias coloniales, una amalgama de explotación colonial y empresarial: «La Compañía judía se inspira en parte en los rasgos de una gran compañía de compra. Podría llamarse Sociedad Comanditaria Judía, aunque no puede ejercer un poder soberano y no tiene tareas sino puramente coloniales.”

«Ante todo irán los más pobres a cultivar la tierra. De acuerdo con un plan preestablecido, construirán carreteras, puentes, vías férreas y puestos de telégrafo, regularán los ríos y construirán sus propias viviendas; su trabajo creará comercio, el comercio creará mercados, y los mercados atraerán a nuevos colonos».

Hacia 1934, un importante grupo de inversores y grandes capitalistas sudafricanos fundaron África-Israel Investments para adquirir tierras en Palestina. Al cabo de cincuenta y cuatro años la empresa sigue existiendo con los sudafricanos como socios y con los activos en manos del Banco Leumi de Israel.


La muralla de hierro

La tensión entre la pretensión de que Palestina estaba vacía y la de someter despiadadamente a los “inexistentes” habitantes era menos aguda cuando los sionistas discutían de estrategia entre ellos. Entonces la realidad de lo que era necesario para colonizar Palestina podía más que la propaganda.

Uno de los abanderados ideológicos del sionismo, Vladimir Jabotinsky, es conocido como fundador del “Sionismo revisionista”, la corriente sionista que tenía poca paciencia con la fachada liberal y socialista utilizada por los sionistas “obreros”. (Actualmente, el sionismo revisionista lo representan Menajem Beguin e Isaac Shamir.)

En 1923, Jabotinsky escribió La Muralla de Hierro, un ensayo que puede considerarse punto de referencia para todo el movimiento sionista. Estableció descaradamente las premisas esenciales del sionismo que, en realidad, habían sido elaboradas antes, aunque con menos elocuencia, por Theodor Herzl, Haim Weizmann y otros. El razonamiento de Jabotinsky ha sido luego citado y recogido por los diversos defensores del sionismo -desde los supuestamente dé “izquierdas” hasta los llamados de “derechas”-. Escribió lo siguiente: «No cabe pensar en una reconciliación voluntaria entre nosotros y los árabes, ni ahora ni en un futuro previsible. Toda la gente inteligente, salvo los ciegos de nacimiento, comprendieron hace mucho la completa imposibilidad de llegar a acuerdos voluntarios con los árabes de Palestina para transformar Palestina de país árabe en país con una mayoría judía. Cualquiera de vosotros tiene una idea general de la historia de las colonizaciones. Buscad aunque sea un solo ejemplo de que la colonización de un país se haya producido con el acuerdo de la población nativa. Eso nunca ha ocurrido. www.marxismo.org

«Los nativos siempre lucharán obstinadamente contra los colonizadores. Da lo mismo que tengan cultura o no la tengan. Los compañeros de armas de Cortés y Pizarro se comportaron como bandidos. Los Pieles Rojas lucharon con ardor inflexible contra los colonizadores de buen y de mal corazón. Los nativos luchaban porque cualquier tipo de colonización, en cualquier parte, en cualquier época, es inadmisible para cualquier pueblo nativo.

«Cualquier pueblo nativo considera a su país como su hogar nacional, del que deben ser dueños absolutos. Nunca aceptarán voluntariamente a otro dueño. Así ocurre con los árabes. Nuestros conciliadores intenta convencernos de que los árabes son una especie de locos que se llamarán a engaño con formulaciones que oculten nuestros objetivos básicos. Me niego en redondo a aceptar esta visión de los árabes palestinos.

«Tienen exactamente la misma psicología que nosotros. Miran a Palestina con el mismo amor instintivo y el mismo auténtico fervor con que cualquier azteca miraba a su Méjico o cualquier sioux a su pradera. Cualquier pueblo luchará contra los colonizadores mientras le quede un hilo de esperanza en que puede evitar el peligro de la conquista y la colonización. Los palestinos lucharán de esta forma en tanto tengan un destello de esperanza.

«No importan las palabras con que expliquemos nuestra colonización. La colonización tiene su propio significado pleno e ineludible, comprendido por cualquier judío y por cualquier árabe. La colonización tiene un solo objetivo. Tal es la naturaleza de las cosas. No es posible cambiarla. Ha sido

necesario desarrollar la colonización contra la voluntad de los árabes palestinos y la misma situación se da hoy.

«Incluso un acuerdo con no-palestinos representa el mismo tipo de fantasía. Para que los nacionalistas árabes de Bagdad, La Meca y Damasco acepten pagar un precio tan grave tendrían que

negarse a mantener el carácter árabe de Palestina.

«No podemos dar ninguna compensación por Palestina, ni a los palestinos ni a los demás árabes.

Por tanto, es inconcebible un acuerdo voluntario. Cualquier colonización, aun la más restringida, debe desarrollarse desafiando la voluntad de la población nativa. Por lo tanto, sólo puede continuar y

desarrollarse bajo el escudo de fuerza que incluye una Muralla de Hierro impenetrable para la población local. Tal es nuestra política árabe. Formularla de cualquier otro modo sería hipocresía.

«Mediante la Declaración Balfour o mediante el Mandato, es indispensable la fuerza externa para

establecer en el país unas condiciones de dominación y defensa en que la población local, independientemente de sus deseos, se vea privada de la posibilidad de impedir nuestra colonización, administrativa físicamente.

La fuerza ha de jugar su papel, con energía y sin indulgencia. Al respecto, no hay diferencias sustanciales entre nuestros militaristas y nuestros vegetarianos. Unos prefieren una Muralla de Hierro de bayonetas judías; los otros una Muralla de Hierro de bayonetas inglesas.

«Al reproche estúpido de que este punto de vista no es ético respondo:’Totalmente falso’. Esa es nuestra ética. No hay otra ética. Mientras los árabes tengan la menor esperanza de obstaculizarnos, no venderán esas esperanzas por ninguna palabra dulce ni por ningún bocado apetitoso, porque no tenemos que -vérnoslas con una chusma sino con un pueblo, un pueblo vivo. Y ningún pueblo hace concesiones tan enormes sobre cuestiones tan decisivas salvo cuando no le queda ninguna esperanza, hasta que hayamos taponado cualquier brecha en la Muralla de Hierro.»


La metáfora del hierro

El tema y las imágenes de la coerción del hierro y el acero utilizados por Vladimir Jabotinsky iba a recogerlos el naciente movimiento nacional socialista alemán, del mismo modo que Jabotinsky se había inspirado a su vez en Benito Mussolini. La invocación mística de la voluntad de hierro en el servicio de la conquista marcial y chovinista unió a los ideólogos sionistas, colonialistas y fascistas. Buscó su legitimidad en leyendas de antiguas conquistas.

La obra de Cecil B. de Mille Sansón y Dalila fue algo más que un romance bíblico de Hollywood sobre la perfidia femenina y la virtud de la fuerza masculina. También portaba los valores autoritarios de la novela en que se inspiró: el Sansón de Vladimir Jabotinsky, que pregonaba la necesidad de la fuerza bruta para que los israelíes conquistasen a los filisteos.

“ ‘¿Debo llevar a nuestro pueblo algún mensaje vuestro?’ Sansón reflexionó unos momentos, y luego dijo lentamente: La primera palabra es hierro. Tienen que conseguir hierro. Tienen que dar todo lo que tienen por hierro: su plata y su trigo, el aceite, el vino y las ovejas, hasta sus mujeres e hijas. ¡Todo por hierro!

Nada en el mundo vale más que el hierro’

Jabotinsky, la sirena de “una Muralla de Hierro impenetrable para la población local” y “la ley de hierro de cualquier movimiento colonizador... la fuerza armada” encontró eco en las décadas siguientes en las mayores incursiones sionistas contra los pueblos víctimas.

El ex Ministro de Defensa, Isaac Rabin, emprendió la guerra de 1967 como jefe de Estado Mayor con “voluntad de hierro”. Como primer ministro, en 1975 y 1976 declaró la política de Hayad Barzel, “mano de hierro”, en la Margen Occidental. Más de 300.000 palestinos tuvieron que pasar por las cárceles israelíes en condiciones de tortura constante e institucionalizada que fueron expuestas por el Sunday Times de Londres y denunciadas por Amnesty International.

Su sucesor como jefe del Estado Mayor, Raphael Eitan, impuso el “brazo de hierro” -Zro'aa Barzel- en la Margen Occidental, y añadió el asesinato al arsenal represivo. El 17 de julio de 1982, el gabinete israelí se reunió para preparar lo que el Sunday Times de Londres llamaría “esa operación militar cuidadosamente preparada para limpiar los campamentos, llamada Moah Barzel o ‘cerebro de hierro’”. Los campamentos eran Sabra y Chatila y la operación “familiar a Sharon y Beguin, parte del plan más amplio de Sharon analizado por el gabinete israelí”.

Cuando Isaac Rabin, que había apoyado al revisionista Likud en el Líbano durante la guerra, se convirtió en ministro de defensa de Simón Peres en el actual gobierno de “unidad nacional”, lanzó en el Líbano y la Margen Occidental la política de Egrouf Barzel, el “puño de hierro”. Y Rabin citó de nuevo el “puño de hierro” como base de su política de represión total y castigo colectivo durante el levantamiento palestino de 1987-1988 en la Margen Occidental y Gaza.


La doctrina de la pureza de sangre

Es interesante recordar también que Jabotinsky localizó”su impulso colonial en la doctrina de la pureza de sangre. Jabotinsky lo detalló en su Carta sobre la Autonomía: «Es imposible que alguien se asimile a gente que tiene una sangre distinta a la suya. Para asimilarse, tiene que cambiar su cuerpo, ha de convertirse en uno de ellos en la sangre. No puede haber asimilación. Nunca hemos de permitir cosas como el matrimonio mixto porque la preservación de la integridad nacional sólo es posible mediante la pureza racial y al efecto hemos de tener ese territorio en el que nuestro pueblo constituirá los habitantes racialmente puros.».

Jabotinsky desarrolló algo más el tema: «La fuente del sentimiento nacional... radica en la sangre de uno... en su tipo raciofísico, y sólo en eso... La perspectiva espiritual de un hombre viene determinada primariamente por su estructura física. Por eso no creemos en la asimilación espiritual. Es imposible, desde el punto de vista físico, que un judío nacido de una familia de sangre puramente judía pueda ser adoptado por la perspectiva espiritual de un alemán o de un francés. Puede ser totalmente imbuido por ese flujo alemán, pero el núcleo de su estructura espiritual será siempre judía.»

La adopción de las doctrinas chovinistas de la pureza racial y la lógica de la sangre no se redujo a Jabotinsky o a los revisionistas. El filósofo liberal Martín Buber situó también su sionismo en el marco de la doctrina racista europea: “Los niveles más profundos de nuestro ser los determina la sangre, que tiñe nuestros pensamientos más íntimos y nuestra voluntad.”¿Cómo se aplicaría esto?

RALPH SCHOENMAN

jueves, 26 de mayo de 2011

Venezuela: Acción intimidatoria y ataque a nuestra soberanía

Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende”Simón Bolívar

Escrito por Luis Alberto Nieto-
Bueno hoy el imperialismo Norte-Americano, arremete contra nuestra soberanía, e impone una serie de sanciones contra nuestro país y sobre todo contra la principal empresa venezolana; PDVSA. Los Estados Unidos pretenden someter a cualquier nación del mundo que3 no siga sus lineamientos y aquellos que no juzguen a terceros como ellos los juzgan.
La medida de aplicar sanciones a PDVSA y otras empresas venezolanas, así como de otros países por mantener relaciones políticas y económicas con Irán, quien es juzgada por Estados Unidos como terrorista. Es un hecho inaceptable y que pretende cuartar el derecho de nuestro país y de cualquier otro de mantener relaciones con toda nación, país o pueblo.

Venezuela es soberana de mantener relación con cualquier país del mundo, de establecer relaciones económicas, cooperación de cualquier índole que vaya en beneficio de nuestro país, del desarrollo del mismo y de su población. Y no debe aceptar la injerencia de un país y un gobierno forajido como lo es el gobierno del Sr. Obama, quien conjuntamente con los gobiernos de Francia y Gran Bretaña, cometen actos criminales en Libia, Afganistán, Irak. Solo por mencionar algunas naciones.

Quien como puede juzgar o no de terrorista a un país y bajo que parámetros, como el premio nobel de la paz, puede sentenciar a otro país como terrorista. Qué pasa con Guantánamo, por que siguen los prisioneros y las torturas. Que paso con las promesas del premio nobel de la paz, porque no cumple.

Lo más asombroso, aunque ya no tanto. Sería contradictorio, aunque no debiera. Es la postura asumida por los opositores al gobierno, los opositores al proceso revolucionario, quienes se hacen eco del imperialismo norte-americano. Como buenos lacayos defiende la posición y el lineamiento bajado por los gringos. Miremos los noticieros y programas informativos, lo arrastrado y gusano que son a la hora de lamer las botas del amo imperialista.

La posición asumida de muchos dirigentes políticos opositores, de defender la actuación del gobierno norte-americano, es otra más de esas posturas entreguistas que ellos han venido asumiendo en diferentes ocasiones y las cuales se han dejado ver muy clara mente sin importarles la soberanía y la dignidad de un pueblo.

Esta postura del imperio, no es solo un ataque al gobierno nacional de la República Bolivariana de Venezuela. Ataca nuestra soberanía, ataca al pueblo, ataca la labor social dentro de nuestro país, ataca la unidad de los pueblos latino-americanos que se ven vinculados a nuestro país y la esperanza que despertó este proceso revolucionario y buscaría crear una matriz negativa contra y hacia nuestro proceso revolucionario.

Sería como ejemplo para aquellos, quienes decidieran seguir el ejemplo venezolano. Ya sea en asumir un camino revolucionario o el hecho del intercambio comercial que tendría que tener cada vais según lo crea conveniente los Estados Unidos de Norte América.

El autentico sueño americano es aquel de un cuchillo apuntando a tu cuello, que si se mueve incorrectamente se puede cortar y quitarte la vida, si así lo desean hacer los Yanquis. Abría que estar alertas y pendiente de los próximos pasos que darían, tanto en lo interno como en lo externo para atacar nuestra patria y al proceso revolucionario.

También tendríamos que estar alerta con aquellos ciudadanos y supuestos dirigentes revolucionarios, quienes desde el ceno de la revolución juegan a la perdida y fracaso del proceso revolucionarios. Se disfrazaron, se pusieron una careta con un interés y poco apoco han venido asumiendo posturas de derecha y sentenciando que la revolución no llegara a buen puerto, pila con esos.

Pero ahora estar alerta ante la próxima jugada del imperialismo y sus aliados, solo habido un movimiento, el cual no podemos menos preciar, pero eso nos debe hacer levantar nuestra voz de protesta y de pueblo soberano y exigir respeto a nuestra patria, a nuestro suelo y nuestra soberanía.

Yanqui no.

No al terrorismo Norte-Americano.

Fuera el Imperialismo.

Luis Alberto Nieto

miércoles, 25 de mayo de 2011

Bildu resume en votos la respuesta vasca a la prepotencia españolista


ESCRITO POR CARLOS AZNÁREZ

Frente a la avalancha devotos que ha obtenido la derecha española a través del Partido Popular (PP) ytambién de otras agrupaciones como es el caso de Convergencia I Unió deCataluña, la espectacular elección realizada por la coalición independentista Bilduvuelve a diferenciar a la Nación Vasca de sus vecinos. Allí, es evidente que unimportante sector de la población reiteró la apuesta de conseguir laindependencia por vía pacífica y con una clara definición nacionalista y deizquierda.

Bildu obtuvo nada más y nadamenos que 313.231 votos, lo que leotorga 1.137 concejales y numerosas alcaldías, derrotando alternativamente envarios pueblos y ciudades al Partido Nacionalista Vasco (PNV), al PSOE y al PP.Superó de esta manera el techo histórico obtenido por la coalición EuskalHerritarrok, hace años, durante otra tregua de ETA.

Bildu, cuya aparición enescena ha sido también muy particular puesto que obtuvo su legalización “sólopor un voto” del Tribunal Constitucional y en el último minuto de plazo para comenzarla campaña electoral, supo aprovechar esta circunstancia y generar en lapoblación vasca la idea de que era necesario levantar las banderas de larebeldía y la insumisión, y arremeter así contra las propuestas represivas quevenían desde Madrid.

Integrada mayoritariamentepor la izquierda abertzale que aúnestá ilegalizada, la coalición sumó en un pequeño “frente” a otros dospartidos: Eusko Alkartasuna yAlternatiba. Acostumbrados a lamilitancia callejera, los seguidores de la izquierda independentista realizaronel milagro, en poco menos de dos semanas y sin recursos económicos, de haceruna campaña ilusionante que promete cambios radicales en los ayuntamientos. Larespuesta de la población no se hizo esperar: con su 22 % de votos, Bildu es lasegunda fuerza en el País Vasco, y por sólo 14 mil votos no alcanzó elliderazgo, que por ahora sigue estando en manos del PNV, que fue la fuerza másvotada.

También es destacable elpapel jugado en Navarra, un enclave que desde hace años es gobernado por laextrema derecha pero donde la izquierda abertzale ha pujado por imponer sus propuestas de “independenciay socialismo”, dando también la batalla por la defensa del euskera, la lenguavasca. Allí, volvió a triunfar la derecha, pero esta vez, sus dirigentes hanentrado en pánico debido al crecimiento imparable de Bildu, quien junto conotra coalición nacionalista (Nafarroa Bai) se han convertido en la llave pararestar poder al actual gobernador ultra Miguel Sanz.

Sin embargo, lo másimportante de lo ocurrido este pasado domingo, que de acuerdo a un voceroindependentista, es una “auténtica victoria forjada barrio a barrio y pueblo apueblo”, es lo que viene de aquí en más. Por un lado, generar las condicionespara que en poco tiempo que falta para las elecciones autonómicas, que escuando se elige al Lendakari , se pueda dibujar un escenario que hasta hacepoco parecía imposible. Se trataría de lograr que un dirigente independentistaasuma ese cargo por votación popular.

En ese sentido, es muyprobable que con el clima creado por el subidón de votos, y la abierta apuesta abertzale para seguir recorriendo la vía política y dejar atrásla experiencia armada– a partir de la tregua “permanente” de ETA- , puedalograrse que el portavoz histórico del independentismo, Arnaldo Otegi, recuperepor fin, su libertad y se convierta en el candidato ideal para dirigir elgobierno vasco, debido al gran carisma del que goza en la población. No envano, lo llaman “el Gerry Adams vasco”, en referencia al dirigente del Sinn Feiny ex militante del IRA irlandés, que condujo las negociaciones de paz en esepaís.

También hay que desear unaimportante presión en la calle por parte de los independentistas para exigirque los 705 presos y presas vascas sean liberados poco a poco y se integren ala política planteada en el actual marco. De hecho, en los festejos deldomingo, el grito más escuchado en boca de la multitud, junto con el de“Independentzia”, fue el de Eukal presoak, etxera“ y “Amnistía”.

De todos modos, la alegríapor lo conseguido, no indica que todo va a ser un lecho de rosas. Si bien,Bildu ha obtenido por cantidad de sufragios la alcaldía de Donosti-SanSebastián y la posibilidad de presidir la Diputación de Gipuzkoa, habrá queesperar qué tipo de alianzas, negociaciones y palos en la rueda, producirán losotros partidos para evitar que esto suceda. Lo mismo, pero al revés, ocurriráen otros pueblos, donde la burguesía vasca peneuvista necesitará los votos abertzales para gobernar o no perder los cargos que ahora sustentan.De esos enjuagues, que muchas veces –y con razón- irritan a los votantes, pero también de la política concretaque los nuevos electos de Bildu desarrollen en los pueblos, surgirán lasposibilidades de que la izquierda independentista siga pisando fuerte y dibujenuevas victorias. Por lo pronto, su irrupción innegable en votos, ha prendidotodas las alarmas en los políticos del PP y el PSOE. Con discursos rayanos enla histeria, la derecha acusa a los socialistas de haber abierto las puertas“para que ETA llegue a las instituciones”. Y viceversa, ya que el PSOE culpa alPP de facilitar con sus posiciones extremistas “que ETA crezca”.

Nada más lejos de larealidad. ETA después de medio siglo de lucha político-militar, en la queenfrentó por todos los medios posibles lo que a su entender es la abiertacolonización española de Euskal Herria, reconoció públicamente –de la mismamanera que lo hizo el IRA en Irlanda- que en la actual etapa, las armas estánde más y que la batalla “por la independencia y hacia el socialismo” deberádarse por vía de la política, lo que no significa sólo la electoral sino la quesurge de la acumulación de fuerzas a través de la organización popular. A partir de esas definiciones se empezóa construir un nuevo camino para los independentistas, y visto lo ocurrido enlas urnas, los resultados son más que satisfactorios. Por lo demás, muchas delas reivindicaciones programáticas de Bildu están contenidas en las demandasplanteadas en las plazas por miles de jóvenes, y no tan jóvenes, a los que elmundo conoce como los “indignados”. No es casual entonces lo sucedido en EuskalHerria, donde la indignación popular por tantos años de ocupación, represión,saqueo, tortura, cárcel y asesinatos, hoy está haciendo germinar la flor tanansiada de la futura independencia.